Los depósitos, según NFPA 13, deben ser dimensionados para poder suministrar la cantidad de agua necesaria, según el tiempo estimado por el riesgo. A partir de esta versión se puede comprobar que el volumen es suficiente para abastecer de agua a la instalación de protección contra incendios. En el listado de comprobaciones se pueden ver los cálculos justificativos.